Alguna vez encontrarán
nuestras esquirlas,
pero no entenderán,
que existen árboles, vociferando
algunas historias, las más dulces
que pude advertir.
En un abrir y cerrar,
tras la guardia insondable,
nos dejamos conectar,
fingiendo ignorar lo que es en verdad,
lo que dura un instante, siendo
estrellas fugaces viajando a la par,
por el espacio elevado,
por el que paso cada tanto.
Tour preciado por la porfiada memoria.
Y es así cómo se da
la dinámica mágica
entre astros.
Estoy guardando el brillo,
en constelaciones,
el de las miradas y los dientes.
Si un deseo, tengo,
espero poder compartirlo, hoy:
que aún a la distancia, podamos bailar.
(Canción)
No hay comentarios:
Publicar un comentario